La influencia del grado de afecto en la interacción persona-computadora entre los estudiantes
El grado de afecto se refiere al nivel de apego o conexión emocional que un individuo tiene hacia un objeto o entidad en particular. En el contexto de la interacción persona-computadora, el grado de afecto puede influir en la calidad de la interacción entre los estudiantes y los sistemas informáticos. La interacción humano-computadora (HCI) es una disciplina que se dedica a diseñar, evaluar e implementar sistemas informáticos interactivos. Se ocupa de estudiar cómo se produce la interacción entre las personas y los sistemas informáticos. En el caso de los estudiantes, comprender el impacto del grado de afecto en la interacción persona-computadora es crucial para mejorar la calidad de sus experiencias informáticas.

El análisis de la interacción persona-computadora entre los estudiantes es un aspecto esencial para comprender el impacto del grado de afecto en las experiencias informáticas. HCI proporciona varios métodos y marcos para estudiar el uso de computadoras y sus implicaciones socioculturales. A través de la evaluación de sistemas, aplicaciones y servicios informáticos, es posible determinar la efectividad de la interacción entre los estudiantes y los sistemas informáticos. Además, los desarrollos en inteligencia artificial e informática han ampliado el alcance de HCI, brindando nuevas vías para mejorar la interacción persona-computadora. Comprender los factores que influyen en la interacción persona-computadora, como el grado de afecto, puede ayudar a mejorar el diseño e implementación de sistemas informáticos para los estudiantes.
El impacto del grado de afecto en la calidad de la interacción persona-computadora entre los estudiantes es significativo. Los estudios han demostrado que el apego emocional a un sistema informático o tecnología en particular puede influir positivamente en la percepción del usuario sobre la usabilidad y la funcionalidad del sistema. Además, el nivel de afecto puede afectar la motivación del usuario para usar el sistema, lo que lleva a una mayor participación y un mejor rendimiento. Por lo tanto, la incorporación de estrategias para mejorar el grado de afecto hacia los sistemas informáticos entre los estudiantes puede conducir a una mejor interacción persona-computadora y experiencias informáticas en general